Factura electrónica: el nuevo requisito que vas a tener que cumplir

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Factura electrónica: el nuevo requisito que vas a tener que cumplir

En 2025 será obligatorio para empresas y autónomos

En septiembre de 2022 se aprobó la ley “Crea y crece”, una nueva normativa que establece como obligatorio el uso de la factura electrónica. Hasta ahora la factura electrónica era obligatoria para las empresas en su relación con la administración, sin embargo, con esta ley la factura electrónica será también obligatoria entre empresarios y profesionales autónomos. El nuevo sistema permitirá un mayor control por parte de Hacienda ya que todas las facturas serán enviadas al fisco.

¿Qué es una factura electrónica?

Una factura electrónica es aquella que está en formato estructurado a través de sistemas informáticos. Esto se debe a que utiliza un lenguaje XML.

Es decir, una factura en papel que se ha escaneado y se ha enviado en pdf por correo electrónico no es una factura electrónica. En este caso, el formato no permite que se tramite de manera automática.

Costes del nuevo servicio

Para que las empresas puedan poner en marcha la factura electrónica es necesario, que cuenten con un programa de facturación y con firma electrónica para todas las facturas. Además, el acceso a la factura debe ser posible durante, al menos, cuatro años

Por eso hay que digitalizar el servicio y aunque el Gobierno ha previsto una fuerte inversión en las empresas de 3.000 millones de euros para esa digitalización, los empresarios y asociaciones de autónomos están pidiendo más implicación de la administración. De hecho, han solicitado que el Gobierno ponga en marcha una plataforma pública y gratuita para llevarlo a cabo tal como se hace ya en Italia y en Francia.

Ventajas de la factura electrónica

  • Facturación mas ágil y en menos tiempo
  • Ahorro de costes por no usar papel
  • Sistema más sostenible
  • Menos errores humanos
  • Mayor transparencia, menos falsificaciones y menos morosidad
  • Se agiliza la facturación y se reducen los tiempos.

Las empresas o autónomos que, estando obligadas a ello, no ofrezcan a los usuarios la posibilidad de recibir facturas electrónicas o no permitan el acceso de las personas que han dejado de ser clientes a sus facturas, se enfrentan a posibles sanciones con apercibimiento o una multa de hasta 10.000 euros.

¿Cuándo entra en vigor?

Antes de que acabe 2023 este sistema será obligatorio para las empresas que facturen más de 8 millones de euros. Para el resto será obligatorio a partir del año 2025.

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